Resultado de la Cumbre de Líderes de América del Norte
Después de casi una década, México volvió a ser la sede de la Cumbre de Líderes de América del Norte(CLAN). La serie de reuniones de alto nivel entre México, Canadá y Estados Unidos augura sólidas acciones, un componente fundamental de la política exterior de México.
Desde el 2005, Canadá, Estados Unidos y México reforzaron sus contactos políticos y la cooperación económica al establecer la Cumbre de Líderes de América del Norte, el foro al más alto nivel entre estos tres países.
La Cumbre de Líderes de América del Norte permite a los gobiernos identificar prioridades comunes objetivos y definir líneas de acción específicas. Todo ello, para que América del Norte sea la región más competitiva y dinámica del mundo.
En este marco, se llevarona cabo reuniones bilaterales entre los presidentes López Obrador y Biden, y también entre el mandatario de México y el primer ministro Trudeau. Las reuniones se desarrollaron alrededor de una agenda que busca alcanzar objetivos concretos a corto y mediano plazos en los temas económicos, cambio climático, movilidad laboral, salud, seguridad, entre otros.
Acuerdos logrados en el marco de la X CLAN
En materia de competitividad, los países norteamericanos coincidieron en la importancia de utilizar al máximo el potencial de las cadenas de suministro de minerales críticos y semiconductores, a través de la adaptación de políticas gubernamentales para aumentar la inversión.
Asimismo, se realizará el primero foro trilateral sobre semiconductores, con el objeto de adaptar las políticas gubernamentales y aumentar la inversión en las cadenas de suministro de semiconductores de América del Norte.
Por otro lado, crearán asociaciones con el sector privado de las regiones para aumentar el desarrollo y la movilidad estudiantil bajo un nuevo Proyecto de Movilidad Estudiantil de América del Norte en coordinación con Canadá y México.
En el tema de cambio climático, los mandatarios se comprometieron a reducir las emisiones de metano y seguir trabajando en áreas de interés trilateral, incluyendo intercambios técnicos. Esto es un gran paso para iniciar una transición energética.
También, se explorará la posibilidad de desarrollar un mercado norteamericano del hidrógeno, así como dedicar esfuerzos para atender el costo social de las emisiones de gases de efecto invernadero.
Con respecto a la migración y desarrollo, Estados Unidos y Canadá colaborarán con México y organismos internacionales para ofrecer servicios y asistencia para personas refugiadas, mismo que no contempla tareas de control migratorio. Esto puede ser el inicio de un convenio migratorio trilateral.
Por el lado de la seguridad, México, Estados Unidos y Canadá se enfocarán en acciones como la Estrategia de América del Norte para Combatir la Trata de Personas, el diálogo norteamericano sobre drogas, en especial en el problema del fentanilo.
En salud, los tres países enfocarán esfuerzos en la revisión y lanzamiento de un nuevo Plan Norteamericano para Influenza Pandémica y Animal (NAPAPI), como un instrumento de respuesta rápida y coordinación ágil de amenazas a la seguridad sanitaria.
En síntesis, la X CLAN fue una reunión histórica que demuestra un buen estado entre las relaciones de México, Canadá y EU. México continuará trabajando con dos de sus principales socios estratégicos, no sólo a nivel regional, sino global.
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